"Si pensaban que porque era 1 (de enero) tenían que dejar sin protección a nuestra Piura están equivocados. Nos obligan a tomar este tipo de decisiones, es como el policía que tiene que trabajar así sea navidad, año nuevo", manifestó al tiempo de señalar que ya ha dado la disposición de identificar a dicho personal para las acciones esperando sea una medida excepcional y no se repita.

FISCALIZACIÓN ELECTRÓNICA. El burgomaestre también anunció que su gobierno impulsará la fiscalización electrónica para frenar los actos de corrupción a nivel de la policía de tránsito o los mismos fiscalizadores. "Con la fiscalización electrónica eso se terminará, quien se pase la luz roja, se estacionen en un lugar prohibido como una línea peatonal va a recibir la multa que corresponda sin reclamo alguno", aseveró.

Aseguró que para lograr este fin, ya se tiene un perfil diseñado por la embajada de Corea, que en el mundo es un país que tiene esta experiencia más desarrollada. "No cuesta demasiado y ello permitirá que los policías cuiden la ciudad y no estén pendientes de quien se pasa la luz roja porque ni siquiera eso se cumple", puntualizó.

Añadió que según la embajada, en un año y medio podríamos tener una primera etapa ya concluida enfocada en el distrito de Piura para poder replicarla en los demás distritos piuranos y así seríamos la primera ciudad realmente inteligente de Latinoamérica.

RETO EN EL MERCADO. En otro momento, Díaz Dios también se refirió a la situación de la privatización del centro de abastos indicando que le darán solución a temas como la falta del diseño general encargado a cada mercado privatizado, cuando la norma interna establecía que ello corresponde a la misma municipalidad y no se ha cumplido. "Lo que se ha avanzado no se tiene que destruir, va a tener que adecuarse, al igual que el problema del parqueo es competencia municipal y lo vamos a resolver", comentó.

Respecto a los ambulantes dijo que no sólo se enfocarán en la parte represiva sino tratarán de entender la razón por la que las personas que tienen un puesto formal están trabajando como ambulantes. "En el caso del mercado zonal San Miguel sabemos que a veces se la pasan sin vender nada y ello los obligaba a salir. Como municipalidad se verán acciones para atraer más demanda comercial, generando incentivos para que las personas retornen a sus puestos", afirmó.

Deploró que el norte no tenga un mercado moderno como sí lo hay en Lima y dejó claro que si esta gestión no moderniza los mercados privatizados éstos van a desaparecer porque no van a poder competir en precios, seguridad, calidad, limpieza, atención al público y la gente va a terminar por mirar a los supermercados.